El onsen privado en la habitación es de lujo, perfecto para relajarse después de un día de explorar. Las vistas desde la habitación son espectaculares, rodeadas de naturaleza que hace que la experiencia sea única.

La falta de limpieza es un problema serio. el futón tenía manchas visibles y las cortinas necesitaban una buena sacudida. Además, el menú para la cena y el desayuno no ofrece opciones, lo que limita la experiencia culinaria. Hay una necesidad de mejorar en la relación calidad-precio, considerando lo que se ofrece.

La habitación era enorme, perfecta para relajarse y disfrutar de la vegetación y el río. Además, el onsen privado era increíble, ¡un lujo total! La ubicación es ideal, muy cerca de una estación de autobús, lo que facilita moverse. La calidad del café gratis es un buen detalle.

lo recomendaría

Disfruté del onsen privado en mi habitación, pero encontré el acceso al lugar algo complicado. La cena kaiseki fue excepcional, ¡más que recomendable!

cerca de paisajes y vistas espectaculares

tuve una experiencia increíble con vistas espectaculares desde mi habitación y un onsen privado que fue simplemente perfecto para relajarme después de explorar la zona, además, el hotel está a menos de 5 minutos a pie de Watanabe Bakery, donde probé unos deliciosos pasteles, pero el desayuno podría mejorar un poco para satisfacer más preferencias.

El onsen privado en la habitación fue increíble.

El onsen privado en la habitación fue simplemente increíble! La comida en el restaurante era impresionante, pero las instalaciones podrían mejorar un poco. En general, pasamos un rato estupendo. 😊

una experiencia agradable pero con detalles que mejorar

La bañera de agua termal privada fue un lujo y una forma excelente de relajarnos después de un día lleno de actividades. La cena kaiseki fue excepcionalmente bien presentada, con sabores auténticos que nos sorprendieron. Las espectaculares vistas de montaña desde nuestra habitación hicieron que la experiencia fuera aún más especial.

El acceso al onsen en la habitación no era tan sencillo como esperábamos.

El personal, el servicio de habitaciones, la experiencia culinaria, el ambiente relajante – todo fue increíblemente memorable.

una experiencia cultural japonesa inolvidable con baños onsen privados

sabores auténticos, acceso conveniente

decoración anticuada

El personal fue increíble, siempre estaban dispuestos a ayudar y nos dieron información útil sobre la zona y el transporte. La ubicación es espectacular, justo al lado del río y rodeado de montañas. El onsen privado en la habitación fue una experiencia inolvidable.

Estoy satisfecho con todo.

El ambiente en el hotel es acogedor y relajante, con una hermosa música que te acompaña desde el lobby. Las vistas de la habitación eran espectaculares, pero la limpieza dejaba que desear, con telarañas y suciedad en algunos rincones. La cena fue exquisita, momentos que compensaron algunos detalles negativos. A pesar de la falta de mantenimiento, el entorno natural es impresionante y se escucha el fluir del río, creando una atmósfera tranquila.